Juventus visitó a Bologna en el estadio Dall'Ara, en la recuperación del partido que había sido reenviado en la 23ª jornada de la Serie A, y otra vez más en este temporada terminó por igualar por 1 a 1 ante los rojo y azul, en esta ocasión de remontada con goles de Marco Di Vaio y Mirko Vucinic.
Con este resultado, la Vieja Señora se quedó segunda, ahora con 52 unidades, dos abajo del líder Milan, mientras que los emilianos atraparon a Atalanta, Fiorentina y Genoa en el onceavo escalón de la clasificación, todos con 32 puntos.
El partido fue muy equilibrado y, en fin de cuentas, el empate fue un resultado justo. Efectivamente, al principio la visita se vio muy apagada, lenta y previsible, tanto que el conjunto de Pioli tuvo el tiempo de tomarle las medidas durante el primer cuarto de hora, para salir de contra y poner ya al 17º el 1 a 0.
En la ocasión, estuvo muy bien todo el equipo local, que con una jugada vertical muy eficaz lo dejó a Di Vaio mano a mano contra Buffón: el delantero, con frialdad y gran sentido del gol, definió con un diagonal rasante de derecha que se metió a lado del poste a su izquierda.
Los bianconeri sintieron el golpe y tardaron en reaccionar, pero paulatinamente aumentaron el ritmo y le crearon algunas dificultades a Bologna, que sin embargo concedió muy poco gracias especialmente a la increíble labor en el medio de Pérez, otra vez más la figura del match.
En el complemento Juventus estuvo mejor, porque logró treparse mucho y se paró más arriba, pero eso lo expuso a las peligrosas contras de los rojo y azul, especialmente porque la pareja improvisada de centrales formada por Cáceres y Bonucci (Barzagli y Chiellini están lesionados) encontró algún problema contra la velocidad de Ramírez y Di Vaio.
Sin embargo, por suerte de la vista el conjunto local se vio bastante impreciso a la hora de definir las jugadas. Así, Juventus mantuvo el resultado y al treceavo logró meter el empata, con una grande invención de Pirlo, quien lo habilitó bárbaro a Vucinic: el montenegrino, sólo ante Gillet, supo definir con un gran toque fino por arriba del arquero.
El match se puso de ida y vuelta, porque los dos cuadros se dieron cuenta del cansancio de su respectivo rival y salieron a buscar el triunfo, lo que hizo que el espectáculo se pusiera realmente emocionante. En ese marco, la Vieja Señora tuvo un par de ocasiones clamorosas, si bien la más clara, con Marchisio, se veía viciada por una clara posición adelantada no cobrada por el juez de línea.
Bologna, por su parte, amenazó con dos entradas centrales de contra que podían poner a algún jugador solo adelante de Buffón, de no ser por dos faltas de Bonucci, quien ya amonestado recibió la gracia del referí en la primera ocasión, puesto que el arbitro no cobró la clara irregularidad, pero terminó por sufrir la segunda amarilla al minuto 38, cuando lo bajó a Ramírez (también la otra falta había sido sobre el uruguayo) en el medio de la cancha con una falta dura que merecía sin dudas la amonestación.
A pesar de la superioridad numérica, el cuadro local no supo encontrar el segundo gol y, en realidad, ni siquiera lo buscó más de tanto, demostrando que, en fin de cuentas, a esa altura del match asegurar el empate era más importante que arriesgar de perderlo.
De esta manera otra vez más, como había pasado en el match de ida, el conjunto de Conte igualó 1 a 1 contra Bologna. Realmente curiosa la temporada de Juventus, que si bien aún mantiene el invicto empató tantas veces que se ubica segundo. Sólo una vez, en la historia de la Serie A, ocurrió que un equipo invicto no ganara el campeonato, pero todo parece indicar que los bianconeri igualarán este récord negativo.
La figura de ESPNdeportes.com: Diego Pérez (8)
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