En el cierre de la decimoctava fecha de la Serie A, la anteúltima de la ronda de ida, Nápoli no pudo superar a Bologna en el San Paolo y tuvo que conformarse con un empate por 1 a 1.
Este resultado los dejó a los celestes en sexta posición con 28 puntos, aún a diez de distancia desde la primera plaza y a siete desde la zona Champions, mientras que los rojo y azul ahora suman 19 unidades y ocupan el decimosexto escalón de la clasificación.
El resultado fue sin dudas justo: los locales, a pesar de algunos errores graves, no merecieron perder, así como los emilianos se llevaron con mérito un punto desde Nápoles, puesto que jugaron muy bien tácticamente, factor que determinó que el partido fuera bastante trabado.
El partido, pero, hubiera podido ser diferente, porque al inicio Bologna cometió uno de los pocos errores de su partido y lo dejó sólo a Hamsik en el medio del área, quien controló y definió desde buena posición, pero Gillet tapó con un milagro verdadero y salvó a su equipo.
Desde ese momento la visita estuvo casi perfecta, corriendo realmente con grande intensidad, ocupando la cancha con un orden táctico excelente y defendiéndose con eficacia.
Además, el equipo de Pioli aprovechó al máximo de un clamoroso error de la defensa rival, cuando nadie lo siguió a Acquafresca y el delantero rojo y azul pudo recibir solo en el área un gran pase del joven Taïder, para vencerlo sin dificultad a un De Sanctis poco reactivo en la ocasión.
El encuentro se le puso en bajada a Bologna, mientras que se le complicó mucho al Burro, claramente, que desde ese momento empujó mucho y por momentos logró encerrar a su rival en su propria mitad de la cancha, logrando crear en todo el primer tiempo apenas un peligro serio con un buen remate de Pandev que salió apenas afuera.
En el complemento la presión local fue aún más intensa: Hamsik se hizo cargo del balón y lo hizo muy bien y los aleros empujaron con grande constancia, sobre todo cuando ingresó Zúñiga por derecha al 56º.
Sin embargo, la defensa emiliana no se dejó vencer y, al revés, concedió realmente muy poco, gracias también al aporte defensivo de los tres hombres de ataque, Di Vaio, Acquafresca y Taïder, quienes se sacrificaron realmente mucho para el equipo.
De todas maneras, el empuje celeste fue realmente mucho y, como era de esperarse, llegó la ocasión propicia para anotar, cuando Mudingayi no alcanzó a despejar un balón y Pérez se lo encontró encima, terminando por bajarlo con un brazo parado apenas adentro del área. El referí, ayudado por el juez de línea, cobró el penal, que Cavani transformó en el tanto del 1 a 1.
El empate le dio confianza a Nápoli, pero la ocasión más clara para ganar el encuentro la tuvo la visita, cuando Ramírez tiró una gran contra por derecha, esperó el momento justo y lo habilitó a Di Vaio, dejándolo solo adelante del arquero, pero el delantero fue algo lento en preparar el remate y terminó por sufrir un tackle excelente de Zúñiga, quien cortó la jugada con una gran diagonal defensiva tras una corrida impresionante.
Al final ninguno de los dos logró argumentar el triunfo y ambos tuvieron que conformarse con un empate, que le viene claramente mal a Nápoli, porque representa la enésima chance para remontar desperdiciada en esta temporada, mientras le vino muy bien a Bologna, especialmente para sumar confianza y mayor seguridad en sí mismo.
La figura de ESPNdeportes.com: Saphir Taïder (8)
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