En un match de la vigésimo fecha de la Serie A, la primera de la ronda de regreso, Juventus le ganó en Turín a Udinese pro 2 a 1: primero Alessandro Matri y Antonio Floro Flores habían puesto el marcador sobre el 1 a 1, pero al final otro gol de Matri, la figura del match, definió el resultado en favor del local.
Con este triunfo, la Vieja Señora se aseguró la primera posición, que ocupa en soledad con 44 puntos, por el momento cuatro arriba de Milan, mientras que Udinese se quedó tercero con 38, pero arriesga ser atrapado por Inter.
Si bien en el complemento se anotaron dos goles, contra el único del primero, fue en los primeros 45 minutos que los dos equipos jugaron mejor y que el local argumentó con buen ritmo y juego el mérito de su triunfo.
En efecto, en la primera etapa tanto Juventus cuanto Udinese se pararon muy bien en la cancha y jugaron realmente muy bien sea en ataque que en defensa, el equipo de Conte buscando mayormente el dominio del balón y la velocidad por las franjas y la visita más concentrada en la contra y en cruzar sus aleros, con los cortes de Armero (el mejor de los suyos) e Isla.
La primera grande chance la tuvo Estigarribia, cuando Quagliarella lo dejó mano a mano pero Handanovic salió y tapó bárbaro, negándole el gol al paraguayo y manteniendo igualado el marcador.
Después fue el turno de los muchachos de Guidolín, quienes primero asustaron con un gran remate desde afuera de Basta y, en el córner siguiente, con un zurdazo de Armero, pero en las dos ocasiones Buffón tapó de manera bárbara, especialmente en el segundo caso, desviándola al tiro de esquina.
Otra vez más se mostró hacia adelante Juventus y nuevamente el local rozó el gol: esta vez los bianconeri salieron a la contra, Giaccherini dibujó un gran pase para Matri, pero el delantero controló apenas mal y Handanovic aprovechó para salir rápido y tapar con un gran manotazo el disparó de su rival, con una tapada realmente milagrosa.
La primera etapa parecía irse hacia el 0 a 0, pero en los últimos minutos el equipo friulano perdió metros y los muchachos de Conte lo aprovecharon enseguida para salir a atacar, apretando a los rivales y atacando con convicción.
La actitud del local se vio premiada al 42º, cuando Juventus maniobró muy bien y llevó con inteligencia el balón hacia la izquierda, en donde Estigarribia se ganó bien el espacio para poner un gran centro al primer palo: ahí Quagliarella le ganó la posición al pésimo Ferronetti y cabeceó al arco, Handanovic tapó pero Matri se demostró el más rápido de todos en alcanzar el balón y realizar el 1 a 0 con un tap-in en puro estilo goleador.
El inicio del complemento fue muy raro, porque la Vieja Señora bajó poco concentrada y cometió algunos errores bastante graves, como cuando Vidal falló un pase horizontal sobre el círculo central (contra cada regla fundamental del fútbol) e Isla pudo robarse el balón, para servírselo a Floro Flores: el delantero, quien entraba apenas por izquierda, controló bien y definió con grande precisión de derecha, clavándola a lado del poste más lejano.
El match se le puso mal a Juventus, porque Udinese tomó confianza y pudo pasar en ventaja, cuando Di Natale desvió un centro de Isla a quemarropa, pero no pudo impactar bien el esférico y la pelota salió alta.
Conte puso un cambio para que su equipo reaccionara, sacándolo a Quagliarella para que entrara Marchisio, y el cambio produjo enseguida un resultado positivo, gracias a un poco de suerte: en efecto, en una jugada algo confundida, el balón le llegó al volante recién entrado algo afuera del área, desde adonde Marchisio la tiró hacia adelante encontrándolo bien parado en la media luna a Matri.
El delantero controló y pudo aprovechar de un gran regalo de Ferronetti, quien retrocedió justo cuando la paraba y se acercó en el momento en el que Matri se daba vuelta, dejándole primero el espacio para controlarla bien y, luego, regalándole el costado para ganar la posición, apuntarle al arco y rematar de zurda, para clavarla a la izquierda de Handanovic.
El gol mató un poco el partido, porque Juventus supo cerrarse muy bien y no le concedió casi más nada a su rival. Además, los dos equipos mermaron paulatinamente sobre el plano físico, lo que le dio la chance al local de controlar con mayor facilidad el desafío.
De todas maneras, Udinese supo molestar a Juventus, creando algunas buenas maniobras ofensivas, pero Chiellini y Barzagli estuvieron realmente impasables, el primero con alguna falta de más (el referí lo dio una mano cuando no cobró la más peligrosa) mientras que el segundo simplemente jugó un partido prácticamente perfecto.
Así, la Vecchia Signora ratificó su grande mentalidad, su buen juego y su candidatura al título, que ahora dista "sólo" 18 partidos.
Como última cosa, hay que dedicar un encomio el hermoso Juventus Stadium: en Turín bajó mucha nieve desde las dos de la tarde, pero la cancha quedó casi perfecta por todos los noventa minutos, sin ni siquiera acumular nieve gracias al sistema de tubos de agua caliente a 30 centímetros abajo del suelo, que mantienen el césped a temperatura constante y determinan el derretirse de la nieve. En cualquier otra cancha italiana, este match no se hubiese jugada o hubiera sido un desastre.
La figura de ESPNdeportes.com: Alessandro Matri (8.5)
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