domingo, 7 de abril de 2013

Video Fiorentina 2 - 2 AC Milan


- Fue un partido realmente muy raro el que Fiorentina y Milan protagonizaron en el Franchi de Florencia, en este trigésimo tercera jornada de la Serie A. Al final terminó 2 a 2: primero Riccardo Montolivo y Mathieu Flaminí pusieron en ventaja a la visita, pero luego los penales de Adem Ljajic y David Pizarro igualaron el marcador.

Un resultado que los deja a los rossoneri terceros, ahora con 58 puntos, así como los violetas se quedan parados un escalón más abajo, en cuarta posición, en este momento con 52 unidades, lo que significa que podrían ser rebasados por Inter y Lazio en esta fecha.

Lo raro del match fue determinado por dos factores: el primero, el pésimo arbitraje del señor Tagliavento, quien hizo realmente de todo para condicionar el match y fue clave en el resultado final. Luego, por culpa del Diávolo, que disputó un gran primer tiempo pero desapareció en la segunda etapa, a pesar de haber jugado por una hora con hombre de más.

Pero vayamos con orden: el conjunto de Allegri bajó muy bien a la cancha, imponiendo una presión ofensiva muy eficaz, que no le dejaba al Giglio construir su maniobra y a menudo le permitía a la visita recuperar el balón arriba y estar así, enseguida, en fase ofensiva.

Fiorentina respondió con la misma actitud, presionando muy alto cada vez que Milan intentaba jugar desde atrás, pero el conjunto milanés lucía mejor parado y así su juego fue más eficaz; tanto que al octavo anotó con Boateng, pero el juez de línea anuló por la posición adelantada de Balotelli, y al cuarto de hora pasó en ventaja, anotando el 1 a 0.

En la ocasión estuvo muy bien Montolivo pero también muy mal Pizarro: el chileno hizo de todo para pasarlo al volante italiano, bastante cerca de su propia área, pero al final el rossonero, con una grande actitud, le robó el balón y desde el límite definió muy bien al palo a la derecha de Viviano.

La ventaja le dio coraje a la visita y golpeó al Giglio, que perdió lucidez y empezó a cometer muchas faltas: Aquilani, en poco tiempo, metió cuatro faltas consecutivas y debía ser amonestado por más de una de ellas o, cuanto menos, por acumulación. Amarilla que, en cambio, se llevó justamente Montolivo, cuando al minuto 35 lo paró con una falta táctica a Ljajic, lanzado en una contra en tres contra uno.

El serbio, en la ocasión, estuvo realmente muy mal, porque debía largar enseguida el esférico, en cambio de darle el tiempo a su rival de alcanzarlo y pararlo, si bien con falta, cerca del medio de la cancha. Pero antes había estado pésimo todo el Diávolo, considerando que en ventaja en el marcador se dejó tomar de contra tras un tiro libre en el que Viviano había cumplido una tapada prodigiosa para negarle el gol a El Shaarawy.

El match estaba muy intenso y emocionante, porque los dos equipos jugaban con mucha calidad e inteligencia, pero no se contaban muchas ocasiones: en efecto, el local amenazó con dos remates, uno de Pasqual demasiado central y otro de Jovetic bastante esquinado, que Abbiati tapó en tres tiempos, primero con los pies y luego con las manos, mientras que Milan, más allá de ese cabezazo del "Faraón", hizo muy poco ccerca del área

Pero al minuto cuarenta el joven delantero italiano se estaba escapando hacia el área rival, cuando Tomovic le cortó el camino, poniendo el brazo algo alto y golpeando la cara de su adversario: falta clara y amarilla, sin dudas, en cambio el referí optó por echarlo al defensor violeta. Una decisión realmente inexplicable.

Milan se relajó mucho, una vez obtenida la superioridad numérica, y ese bajón se tradujo en metros perdidos en la cancha, algo que le costó la amarilla también a Muntari, dejado en el vestuario durante el entretiempo. Curiosidad: los milaneses salieron muy tarde a la cancha en el complemento, quizás un síntoma de su merma sobre el plano anímico.

En efecto, bajaron con poco ritmo, concentrados en administrar el resultado, algo que, de todas maneas, estaban logrando sin demasiada dificultad, para encontrar con un "truco" el 2 a 0 al minuto 17: en la ocasión, el Diávolo sacó a sorpresa un tiro libre por la derecha y Montolivo puso un gran centro hacia el primer palo, que Falminí conectó con calidad clavándola a lado del poste más lejano.

Parecía ya todo terminado, en cambio había que hacer las cuentas con la desaparición de los rossoneri y con Tagliavento, quien empezó a cobrar todo mal y al 21º regaló un penal, por supuesta falta de Nocerino a Ljajic: el volante se llevó la amarilla y el delantero serbio, desde los once metros, descontó el marcador.

Al rato Aquilani fue amonestado, finalmente, pero no por su sexta falta (también esta algo dura), sino por protestas. Al 28º, sin embargo, el referí finalmente acertó una, cobrando justamente el segundo penal para los violetas, por una clara falta de De Sciglio a Cuadrado. Fue Pizarro, esa vez, a presentarse sobre el disco blanco pero el resultado no cambió: gol y 2 a 2.

El referí, evidentemente muy contento con el resultado y "poco satisfecho", quizás, por haber cobrado una bien, en lo que quedó del match se olvidó de cobrar dos claros penalty en favor del conjunto rossonero, el primero por un claro empujón de Pasqual a Abate, quien entraba con todo por derecha, y el segundo casi sobre la hora, cuando Roncaglia interceptó claramente con el brazo derecho un córner pateado por Milan, desde la izquierda.

Al final el referí pudo con todo, rindiendo inútiles los cambios ofensivos de Allegri y el empuje final de su equipo, y así fue 2 a 2. Vale la pena subrayar también que Montella nos desilusionó un poco: es cierto que con hombre menos remontar dos goles fue una gran cosa, pero el empate no le sirve mucho a los violetas, que así están prácticamente afuera de la pelea pro la Champions. En ese contexto, los cambios defensivos del entrenador no convencieron.
La figura de ESPN.com: Riccardo Montolivo (8.5)

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