En el estadio Franchi, Siena le ganó a Chievo por 4 a 1 en un desafío de la décima jornada del Calcio (la novena jugada).
Mattia Destyro, con un doblete, y Gaetano D'Agostino llevaron en triple ventaja a los locales, antes que Davide Moscardelli descontara y Emanuele Calaió le diera cifras definitivas al marcador.
De esta manera, los albinegros ahora suman 13 unidades en la tabla y, por el momento, comparten con Cagliari y Palermo la séptima posición de la tabla, mientras que los azul y oro, en la espera de los otros partidos, se quedaron doceavos junto a Atalanta, Fiorentina y Parma, todos con 9 puntos.
El partido realmente no tuvo historia, porque Siena fue más, se paró muy bien en la cancha, defendió muy bien y metió cuatro goles aprovechando al máximo casi todas las ocasiones creadas.
Sin embargo, el partido pudo tomar otra dirección, porque al inicio Chievo no estuvo mal, con una buena presión y creando una chance muy buena para meter el 1 a 0, cuando Cruzado y Moscardelli inventaron pero Pellissier desperdició.
Pero en general, fue el local el que mantuvo el control del juego, pasando merecidamente en ventaja con Destro al minuto 25: en la ocasión, el delantero resistió a una falta de Mandelli, lo gambeteó bárbaro a Frey con un gran enganche y, desde la izquierda, sacudió un derechazo que tocó el poste ma´s lejano y terminó adentro del arco.
El conjunto de Di Carlo intentó reaccionar, pero logró mostrarse con peligro sólo con un tiro libre de Moscardelli que Brkic desvió muy bien sobre el travesaño, salvando el resultado.
En el complemento, los albinegros bajaron con todo, para transmitir en el resultado el dominio visto en el juego. Así, en un cuarto de hora los muchachos de Sannino cerraron el match con dos tantos.
El 2 a 0 fue una gran jugada: Gazzi cortó en la mitad de la cancha rival y tocó para Destro, quien le devolvió el balón sobre la izquierda a su compañero. El volante premió la entrada de D'Agostino por el carril del diez y éste metió un gran toque fino por arriba de la defensa, para que Calaió rematara de tijera, Sorrentino tapara y Destro empujara adentro con el arco libre.
El tercero también fue un gran gol, llegado con un zurdazo inatajable de D'Agostino directamente desde tiro libre, con el esférico que tocó el cruce de los palos a la izquierda del arquero visitante (ese cruce que rechazó el disparo de Moscardelli en el primer tiempo) y terminó inflando la red.
Siena se relajó un poco, con toda la rabia de Sannino por eso, y sin dejar de defenderse bien, terminó por conceder una ocasión a su rival que Moscardelli, bien habilitado por un cuchillazo de Pellissier, aprovechó al máximo entrando por derecha y definiendo con un remate cruzado inapelable.
Los locales no sufrieron el golpe y, al revés, hasta le dieron cifras más contundentes al resultado con un gol de contra en minutos de descuento, anotado por Calaió con gambeta en mano a mano tras una corrida de cuarenta metros.
La figura de ESPNdeportes.com: Mattia Destro (8)
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