En el estadio San Siro, en un partido de la novena fecha del Calcio, Milan goleó a Parma por 4 a 1, con un triplete de Antonio Nocerino, la figura del partido, y un tanto de Ibrahimovic (el momentáneo 3 a 0) y, e esta manera, el Diávolo se ubica cuarto junto a Nápoli con 14 unidades.
Los azul y oro, que por su parte descontaron con el inútil 1 a 3 de Sebastián Giovinco, suman aún nueve puntos y ahora comparten con Atalanta, Fiorentina y Chievo la doceava posición de la clasificación.
A pesar de lo que puede parecer por el resultado, al principio el partido estuvo bastante equilibrado, con la visita bien parada en la cancha cubriendo las zonas en las que el Diávolo prefiere jugar.
El error de Parma estuvo en el hecho de cerrarse demasiado en su propria mitad de la cancha, renunciando a la fase ofensiva, de manera que Milan pudo empujar mucho, creó algunas chances y, al final, a la media hora encontró el 1 a 0. En la ocasión, Ibrahimovic metió el balón en el medio, Nocerino aprovechó de una carambola en el área y definió con un toque de punta el mano a mano, madrugando la salida de Mirante.
Dos minutos más tarde, el mismo volante local metió un golazo, cuando cerca del vértice izquierdo de la medialuna, paró de pecho un despeje corto de la defensa y con su zurda le pegó con un fierro, clavándola en el cruce de los palos a la derecha del portero rival.
Milan pasó a controlar el partido con tranquilidad, moviendo bien el balón y aprovechando de su rival, que como a menudo le pasó en este campeonato, reaccionó a las desventaja tirando la toalla.
En el complemento, el Diávolo buscó el golpe del definitivo nocaut con alguna aceleración rápida, entre un toque y otro, y lo encontró cerca de la media hora: Cassano peinó bárbaro un pelotazo largo, Ibrahimovic ganó la pelea física con Feltscher y definió con seguridad el mano a mano.
Paradójicamente, el tanto de la seguridad provocó una reacción de Parma, que salió a buscar por lo menos el gol de la bandera, que encontró cinco minutos más tarde, claramente con una jugada de Giovinco: el delantero aprovechó un agujero dejado por Abate (otra vez más los rossoneri sufrieron un gol), para recibir en el área y definir de zurda entre las piernas de Abbiati.
El partido, claramente, no cambió con ese episodio y, al revés, Milan siguió controlando con gran dominio, para encontrar hasta el cuarto gol para la alegría de Nocerino, quien conectó de cabeza un buen centro desde la derecha para anotar su primer triplete en carrera.
La figura de ESPNdeportes.com: Antonio Nocerino (9)
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