Juventus venció a domicilio a Siena por 1-0, con un gol de Alessandro Matri, en un partido de la tercera fecha (la segunda en realidad, puesto que la primera fue postergada) del campeonato italiano de fútbol.
Con este resultado, Juventus suma seis unidades y comparte con Udinese y Cagliari la primera posición de la tabla, donde podría ser alcanzada también por Nápoli en caso de triunfo de los celestes en el posticipo de la fecha ante Milan. Siena, por su parte, con un punto se ubica junto a otros seis equipos en la onceava posición.
El partido fue muy intenso y cerrado, como era lógico entre dos equipos que jugaban esquemas prácticamente especulares, dos 4-4-2 sólidos más que ofensivos. En ese marco, Juventus fue seguramente más protagonista y mereció el triunfo por la mínima diferencia.
En efecto, Antonio Conte eligió a Giaccherini y Pepe para las funciones de externos, y por lo tanto el tan mencionado 4-2-4 existió sólo en la fantasía de los hinchas. Matri y Vucinic formaron la pareja ofensiva y entre ellos, como veremos enseguida, armaron la jugada que decidió el partido.
En fernte, Siena mostraba un sistema similar pero mucha menos calidad técnica y, sobre todo, menos peso ofensivo, puesto que Calaió y Gonzáles (luego ingresó el otro argentino, Larrondo) se mostraron realmente muy livianos en los 16 metros rivales.
Así, en la primera etapa, con los centrales defensivos (sobresalientes Terzi y Barzagli) que les ganaron cómodamente el duelo a los delanteros, el empate en cero fue apenas una consecuencia lógica de un enfrentamiento en el que el equipo favorito, Juventus, no quiso nunca arriesgar demasiado y el local, entonces, pudo controlar casi sin sobresaltos el trámite.
Pero, al comienzo de la segunda etapa, Juventus encontró el gol: un cambio de frente para la corrida de Giaccherini por derecha, el centro rasante que Vucinic trabajó muy bien cerca del primer palo, para provocar la salida del arquero y habilitarlo a Matri en el corazón del área, desde donde el compañero pudo anotar con un derechazo cruzado.
De ahí en adelante (faltaban 36 minutos) casi no hubo más partido, porque Juventus esterilizó con facilidad las iniciativas del local, máxime cuando, con el ingreso de Vidal por Vucinic, pasó a un 4-2-3-1 que le permitió el dominio casi total de la pelota.
Más tarde ingresó Alex Del Piero por Matri, lesionado, y si bien Juventus quedó sin delanteros de área, no tuvo problemas para seguir controlando el juego y, en realidad, anduvo más cerca del segundo (tres remates de Vidal, ninguno con precisión) que Siena del empate.
De esta manera, Juventus se ratifica como posible candidato al título: el juego aún no despega, el fixture hasta ahora fue muy favorable pero el tiempo juega en favor de Conte y comenzar con dos triunfos no puede que darles seguridad y confianza a sus hombres. Siena lució ordenado y prolijo, pero sin un delantero más punzante le será muy difícil salvarse con comodidad.
La figura de ESPNdeportes.com: Andrea Barzagli (8)
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