Cesare Prandelli anunció al final del partido contra Uruguay que tanto él como el presidente de la federación de fútbol de Italia, Giancarlo Abete, dimiten de sus cargos tras la eliminación de la zzurra en el Mundial de Brasil en la primera fase.
“Me equivoqué, lo asumo. Yo quiero ir con la cabeza alta. No quiero que la gente piense que malgastamos el dinero de los contribuyentes o que nos llevamos el dinero pese a haberlo hecho las cosas mal. Es mi responsabilidad presentar mi dimisión cuando el proyecto técnico fracasa. Es justo que se asuma la responsabilidad. Es irrevocable”.
“Después del partido hablé con el presidente de la Federación y le dije que renuncio porque soy el principal responsable de la eliminación. Es mi responsabilidad y mi culpa. Cuando el plan técnico falla el responsable debe marcharse”.
El hasta ahora presidente de la Federación Italiana de Fútbol, Giancarlo Abete, anunció que ya tenía la decisión de su marcha tomada antes del Mundial y recomendó no aceptar la denuncia de Prandelli en la cuenta de Twitter de la selección italiana.
“Yo iré al Consejo con mi dimisión irrevocable, ya la había tomado antes de ir al Mundial. Seguiré haciendo política deportiva pero quiero liberarme de cualquier problema con la Federación. El nuevo presidente tendrá todo mi apoyo incondicional. Estoy decepcionado como aficionado, pero hemos hecho el máximo”.
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