Udinese sorprendió en el Juventus Stadium al vigente campeón (0-1), incapaz de reconducir un partido que se le atascó desde el principio y donde careció de puntería hacia el gol.
El conjunto de Massimiliano Allegri, ganador del scudetto en los cuatro últimos años, se estrelló ante un rival ordenado que aprovechó su ocasión y los despistes de un equipo que aún sometido por el período de rodaje.
Udinese despertó de un mazazo al cuadro de Turín, que en todo el curso pasado solo conoció en tres ocasiones la derrota. Ninguna de ellas en su campo.
El croata Mario Mandzukic, exjugador del Atlético Madrid, asumió la responsabilidad ofensiva del Juventus, que no contó con Álvaro Morata, lesionado, y que solo recurrió a Fernando Llorente a diez minutos del final, con el marcador en contra. El español saltó al campo por el argentino Roberto Pereyra.
El campeón cercó una y otra vez la meta del meta griego Orestis Karnezis. Ejecutó innumerables disparos. Ninguno entró. Sin embargo, a un cuarto de hora del final, el trabajo del Udinese tuvo premio.
Una acción por la izquierda del albanés naturalizado griego Panagiotis Kone fue aprovechada por el francés Cyril Thereau, sin oposición, en el segundo palo, dejando en evidencia la zaga local.
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